El Periódico digital denominado Ahora El Pueblo es un medio comunicacional de propiedad del Estado Plurinacional de Bolivia que se fundó en enero de 2009 con el nombre de CAMBIO. Sin embargo, debido a la coyuntura política del país fue sujeto a diversos cambios, tanto en el nombre y su diseño multimedia como en el contenido de la información que ofrece.

El actual responsable del periódico del Estado, Marco Santiváñez, informó para la Agencia Boliviana de Noticias (ABI) que “Ahora el Pueblo” hizo cambios en su esencia desde que su persona asumió la dirección de ese medio de comunicación en el año 2020. Ello con objeto de democratizar el acceso a la información a la población y permitirle a la ciudadanía obtener información veraz.

En el portal de la web del periódico Ahora El Pueblo (https://www.ahoraelpueblo.bo/ ), el medio se define como un periódico que “tiene la misión de democratizar la información, permitir que todas las voces de nuestra patria sean impresas en el medio escrito de los bolivianos. El periódico estatal se regirá en los artículos 106 y 107 de la Constitución Política del Estado, que manifiestan que el Estado garantiza el derecho a la comunicación y el derecho a la información, el derecho a la libertad de expresión, de opinión y de información, a la rectificación y a la réplica, además de emitir libremente las ideas por cualquier medio de difusión, sin censura previa.”

Después de haber hecho un análisis de las características del periodismo digital del periódico Ahora El Pueblo, se puede decir que, en cuanto a la multimedialidad, la página web del periódico en cuestión integra, moderadamente, en su soporte diferentes formatos como; texto, fotografías y vídeos en sus diferentes secciones (las cuales están bien definidas y permiten al usuario acceder fácilmente en la búsqueda que quiera realizar), sin embargo, le falta hacer uso del sonido a través de audios informativos y de imágenes animadas.

En lo que respecta a la característica de la hipertextualidad, dentro de la página web de este periódico no se identificó la utilización de hipertextos dentro de las noticias para reforzar la información, no obstante, en la portada se advierte la presencia de enlaces de su cuenta de Twitter, Facebook y YouTube.

Dentro de la página web del periódico digital Ahora El Pueblo no existen espacios de interacción como tal, donde el lector pueda comentar a cerca de un tema en específico y romper la unidireccionalidad en el medio de comunicación. El diario no ofrece la opción de hacer comentarios (solo lo permite a través de su twitter, Facebook y Youtube). Es decir, no cuenta con un espacio en el que se puedan realizar discusiones de algún tema determinado ni dentro de las noticias ni en el portal.

En el ámbito de la característica de la mundialización, se puede decir que este medio no produce contenido propio de interés global, empero, enlaza contenido de agencias internacionales con temas de interés mundial. Su alcance aún es de carácter nacional.

En cuanto a la personalización, el periódico cuenta con secciones bien definidas en la página de inicio, lo que permite al lector dirigirse con facilidad al contenido de su interés. Llama la atención que no frece al usuario suscribirse a través de su correo electrónico para que este reciba notificaciones de las noticias más importantes.

Al ser un medio estatal, la página web del periódico digital Ahora El Pueblo cumple con una periodicidad activa, ya que actualiza las noticias diariamente de acuerdo a la relevancia que tengan y relación que exista con las actividades que realiza el Gobierno.

Cabe recordar que Ahora El Pueblo cambió su nombre en dos oportunidades debido a la coyuntura política del país, pese a ello, es reconocido a nivel nacional y leído, en su mayoría, por sectores de la línea del Gobierno actual. No obstante, a pesar de lo dicho en líneas anteriores, no se puede dejar de recordar que se está hablando de un periódico estatal, por lo cual la confiabilidad se pone en entredicho, puesto que la mayoría de los contenidos, ya sean notas, editoriales, opiniones, publicidades, etc. tienden a difundir una realidad construida desde la línea ideológica y política del gobierno.