El uso del naranja responde a que este color representa el futuro brillante y optimista, libre de violencia contra las mujeres y niñas.
Las jornadas de movilización se desarrollan en diversas partes del mundo. Este año la temática es “Pinta el mundo de naranja: ¡Pongamos fin a la violencia contra las mujeres YA!”
El lunes 25 de noviembre comienzan los 16 días de activismo contra la violencia de género. En esa fecha se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, y los 16 días de toma de acción se extienden hasta el 10 de diciembre, declarado por Naciones Unidas como Día de los Derechos Humanos.
Personas y organizaciones privadas y de la sociedad civil de todo el mundo utilizan estas jornadas como estrategia organizativa para promover la prevención y eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas. El tema mundial de este año para los 16 días de activismo es “Pinta el mundo de naranja: ¡Pongamos fin a la violencia contra las mujeres YA!”
El uso del naranja responde a que este color representa el futuro brillante y optimista, libre de violencia contra las mujeres y niñas.
Esta táctica se desarrolla desde hace 30 años, a partir de la iniciativa de un grupo de activistas en la inauguración del Women’s Global Leadership Institute en 1991. Más de 6.000 organizaciones de aproximadamente 187 países han participado en la campaña desde entonces.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de la Mujer (ONU Mujeres), “casi una de cada tres mujeres de 15 años o más en todo el mundo ha sufrido violencia física o sexual por parte de la pareja, otro agresor o ambos, al menos una vez en su vida, lo cual indica que los niveles de violencia contra las mujeres y las niñas en gran medida no han cambiado durante la última década”.
Las cifras pueden ser incluso más altas, pues no reflejan el impacto de la pandemia del covid-19 que ha obligado a millones de mujeres a confinarse con sus agresores.
La cruzada convoca a las instituciones y la sociedad civil a movilizarse con la finalidad de:
· Defender estrategias, programas y recursos inclusivos, integrales y a largo plazo para prevenir y eliminar la violencia contra las mujeres y las niñas en los espacios públicos y privados priorizando a las mujeres y niñas más marginadas.
· Amplificar las historias de éxito que demuestran que la violencia contra las mujeres y las niñas se puede prevenir, mostrando estrategias e intervenciones eficaces para inspirar a todos los actores a fin de que amplíen las soluciones que dan resultado.
· Promover el liderazgo de las mujeres y las niñas en su diversidad y su participación significativa en la formulación de políticas y la toma de decisiones desde la escala mundial hasta las escalas locales.
Tres valientes hermanas inspiraron el día reivindicatorio
En 1999, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer en honor a las hermanas Mirabal. Patria, de 36 años, Minerva, de 34 y María Teresa, de 25 fueron brutalmente asesinadas en esa fecha 39 años antes, durante el gobierno de facto del dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo (1930-1961).
El “crimen” de estas mujeres fue haber luchado por sus derechos. En la resolución adoptada para instituir la jornada reivindicativa, la ONU define a la violencia de género como “todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”.
La violencia contra las mujeres es un obstáculo para construir sociedades inclusivas y sostenibles.