El procedimiento es ambulatorio, dura solo 30 minutos, y se realiza únicamente con anestesia local (foto: Ewa Urban en Pixabay)
El número de varones que se inclinan por este método para el control de la concepción va en aumento. Una campaña de intervención gratuita, a cargo de CIES, despierta mucho interés.
Por: Josué Daza
Edición: Patricia Cusicanqui
¿Es la salud sexual y reproductiva también un asunto de varones? La respuesta es Sí. Y parte de ello es decidir si quieren o no tener hijas e hijos, cuántos, cuándo y cómo; por tanto, conocer y acceder a información sobre salud sexual y reproductiva y métodos anticonceptivos es vital para ejercer este derecho, que también contribuye a respetar y fortalecer los derechos de las mujeres.
De acuerdo con el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), se entiende por salud sexual y reproductiva el “estado general de bienestar físico, mental y social, y no a la mera ausencia de enfermedades o dolencias en todos los aspectos relacionados con la sexualidad y la reproducción, y entraña la posibilidad de que hombres y mujeres ejerzan los derechos sexuales y reproductivos”.
En tanto que la salud reproductiva masculina se refiere a decidir libre y responsablemente la probabilidad de ser padre; decidir y negociar con la pareja, si así lo desean, el momento de la concepción de las hijas e hijos; y disponer de la información y el uso de métodos anticonceptivos para lograrlo.
En Bolivia, según la Encuesta de Demográfica y Salud de 2016, a cargo del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 55,8% de la población masculina consultada expresó desconocer la existencia de la vasectomía como método de anticoncepción. Los hombres encuestados tenían entre 15 y 64 años. Y de acuerdo con datos del Ministerio de Salud y el Sistema Nacional de Información en Salud (SNIS), para ese año, en todo el país se habían realizado únicamente 355 vasectomías.
Desde entonces, ha pasado un quinquenio y aunque no hay un nuevo estudio al respecto, la experiencia de CIES, Salud Sexual – Salud Reproductiva, da cuenta de un incremento de varones que optan por este método.
En noviembre de cada año, esta institución lanza una campaña gratuita de vasectomía. Esta vez la convocatoria se publicó en Facebook, y para el segundo día de promoción, los 30 cupos disponibles se habían agotado.
Técnica no invasiva, económica y eficaz
Hans Verástegui, responsable Educativo del Área Comunicativa del CIES La Paz, indica que la gratuidad de esta campaña permite el ejercicio de los derechos reproductivos del hombre.
Este tipo de cirugías son de tipo ambulatoria, es decir no requiere hospitalización, se realiza con anestesia local, sin bisturí y en solo media hora. La efectividad es de entre el 98 y 99%. “Es mucho más económica y accesible que una ligadura de trompas”, explica Verástegui.
El procedimiento está a cargo de un urólogo, quien hace una pequeña punción en la parte anterior del escroto (donde se hallan los testículos); luego se ligan los conductos seminales o deferentes. El organismo no deja de producir espermatozoides, pero estos se reabsorben. La eyaculación de semen seguirá manteniendo su color, textura y cantidad. Es, además, un procedimiento reversible, que se conoce como vasovasostomía.
“La vasectomía es uno de los pocos métodos que permiten a los hombres asumir la responsabilidad personal de la anticoncepción. Es sumamente eficaz y no afecta la potencia sexual ni la masculinidad”, aclara la división de Planificación Familiar y Salud Reproductiva de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Verástegui calcula que un aproximado de 150 pacientes se sometieron a este método anticonceptivo entre 2019 y 2020 a través de sus campañas. “El año pasado (2020) por el tema de cuarentena, se ha disminuido mucho la cantidad de personas que han accedido a la convocatoria”, precisa.
Cada 20 de noviembre se conmemora en Día Mundial de la Vasectomía, instituido en 2013, razón por la que CIES eligió este mes para su cruzada.
Al menos 4 razones motivan a los varones
Las razones identificadas para que los varones accedan a este método que evita el embarazo de sus parejas son económicas, limitar el número de hijos e hijas, expectativas de desarrollo personal fuera del rol paterno y el nulo deseo de procrear.
“Hemos atendido a jóvenes de 19 años que no quieren tener hijos. La ley nos faculta poder atender a jóvenes con mayoría de edad (a partir de los 18 años)”, apunta Verástegui.
Las políticas de salud deben ser promovidas de manera integral y sin distinción o discriminación de género. Al hablar de derechos reproductivos, responsabilidad paterna y planificación familiar, los varones también asumen esta decisión asumible. El acceso a métodos anticonceptivos y la educación sexual forman parte del desarrollo de todas las personas sin distinción.
CIES se identifica como es una red nacional de servicios integrales con enfoque de género de salud sexual y reproductiva desde 1987, con un programa de Ambiente Amigable con las personas LGBTIQ+. Para más información sobre sus servicios y campañas se puede llamar a la línea gratuita 800 11 2437 o visitar su sitio web en www.cies.org.bo.
