Uno de los retos trazados en el Laboratorio 5 fue crear propuestas de medios digitales alternativos que brinden información verificada a diversos públicos, como los jóvenes.

Para la coordinadora Gabriela Orozco, la mejor manera de llegar a una audiencia juvenil es abordando los temas elegidos con un formato actual y poniendo en contexto los hecho a informar. Así, la clave del éxito para este tipo de medios será la generación de contenido para cada plataforma que se esté pensando utilizar. “Por ejemplo, el uso de TikTok y el trabajo conjunto con algún influencer puede ayudar en la difusión de contenidos”, aseguró.

Foto: Gabriela Orozco, coordinadora del Lab 5.

Orozco también mencionó que todo medio o producto debe resolver una necesidad de su audiencia, por lo tanto “es importante informar sobre el problema que se resuelve a través del contenido en la página del medio y en las plataformas por las cuales se va a difundir dicho contenido”, afirmó y puso como ejemplo a  “Fifanaticos”, uno de los proyectos del laboratorio, prioriza la utilización de Facebook y una página web para distribuir contenido sobre el juego del FIFA a los usuarios que gustan de este juego.

Por lo tanto, insistió en que el formato en la que se va a presentar la información es lo importante para determinar si el mensaje puede ser correctamente recibido por la audiencia.

La facilitadora del laboratorio también recomendó a los participantes que, además de la elaboración de mensajes y el prototipado de los proyectos, necesitan un presupuesto real, de modo que los colaboradores interesados en sus propuestas, puedan estar dispuestos a cubrir los costos.

Foto: Exposición de la participante Valentina Reinoso.

El Megáfono Boliviano y la educación sexual en los adolescentes

 El megáfono Boliviano es uno de los proyectos del laboratorio que propone un segmento de educación sexual enfocado en adolescentes y jóvenes entre 16 y 23 años. Para saber la mejor forma de difundir esta información, Valentina Reinoso, la creadora de la propuesta, realizó encuestas a jóvenes de Tarija quienes afirmaron que recibieron educación sexual en algún momento de su vida, sobre todo en colegio, pero de una manera formal y que recibirían con agrado la información si está planteada en formatos juveniles.

”La mayoría de los jóvenes afirmó que la información debería ser transmitida por Facebook, con un contenido más serio y en TikTok difundir un material más gracioso”, explicó. “Una alternativa para la difusión de la información es el trabajo conjunto con influencers, de modo que estos apoyen en la difusión por la gran cantidad de seguidores y llegada que tienen”.

Una Red de Radios Comunitarias para informar y evitar desastres

Este proyecto busca impulsar una red de radios comunitarias para el Sistema de Alerta Pilcomayo, de modo que contribuya a la difusión de las alertas y prevención de eventos climáticos adversos a los productores del Gran Chaco, para resguardar los medios de vida de las comunidades.

Para desarrollarlo, la periodista Inga Olmos pretende utilizar las plataformas digitales como WhatsApp o Telegram para comunicación interna y una plataforma web para el intercambio de información y de contenido de capacitación.

Foto: Exposición de la participante Inga Olmos.

Asimismo, la periodista explicó que este proyecto “de manera indirecta beneficia a más de 40,000 personas que son los pobladores que se viven en la Rivera Pilcomayo, sin contar a ciudades intermedias grandes como Villamontes. También existe un beneficio directo a las radios comunitarias a los reporteros y comunicadores pertenecientes a las radios locales en el gran Chaco”

Para Gabriela Orozco, coordinadora del proyecto, en este proyecto es importante el uso de la radio para la alerta a las comunidades para evitar desastres naturales.

El Laboratorio 5 “Conformación e implementación de medios informativos multimedia ”, es una iniciativa de la Fundación Para el Periodismo con el apoyo de la DW Akademie. Forma parte del Diplomado “Procesos experimentales y propositivos para la construcción de los medios del siglo XXI” desarrollado junto a la Universidad Privada Boliviana.